Pao II

Uyyyyyyyy……..Que reconfortante es recibir tanto afecto.
Pienso lo contrario, creo que estamos conectadas en un universo paralelo. Donde las leyes físicas y químicas, no son las que conocemos. Existe un diálogo corporal y mental que nos une sin mediar palabras.
Si no toco a tu puerta es porque respeto tu tiempo y tu silencio. Y porque además considero que ese espacio es un lugar desde dónde se construyen o destruyen otras subjetividades que nos dan pié a estar de nuevo juntas si tomamos el impulso necesario o a que nos quedemos observando detrás de las ideas. Porque sí, es cierto, siempre tendremos Paris… Lo que nos unió nunca va a morir, es un universo maravilloso y latente que siempre va a existir, porque un día nació, y todo lo que nace evoluciona, y si, aparentemente muere es para mutar a otra forma, que supuestamente perdemos de vista…, pero está…
Al ver………., verás……………..
Me decís, que creés que desde allì, las despedidas te agradan o las preferís. Ley de Cierre, que asi le llaman los gestalticos. Estoy de acuerdo con esa ley, pero es nuestra mente la que le da el cierre.
La factible realidad es otra, y el final siempre queda abierto, al libre albedrío de nuestros intereses, miedos o caprichos.
Haces referencia al principio, a nuestra diferencia de edad, de estilo y de posicionamiento ante las situaciones, que bueno eso!! Es loco pero engendró un engranaje vital y positivo, al menos para mí.
Caminar por la vida, y por momentos, hacerlo a tu lado, me genera nuevos impulsos.

Mi querida Paola

Gracias por el Soneto a mamá.....

No es que no vuelva porque me he olvidado
de tu olor a tomillo y a cocina,
De lejos, dicen que se ve más claro,
que no es igual quien anda y quien camina.

Y supe que el amor tiene ojos verdes,
que cuatro palos tiene la baraja,
que nunca vuelve aquello que se pierde
y la marea sube y luego baja.

Supe que lo sencillo no es lo necio,
que no hay que confundir valor y precio,
y un manjar puede ser cualquier bocado.

Si el horizonte es luz y el rumbo un beso,
no es que no vuelva porque te he olvidado...
es que perdí el camino de regreso, mamá.

Con respecto al hermosísimo soneto de mi muy apreciado Serrat, y a riesgo de todo, de lo patético y de lo ridículo. Del ruedo corto y el pecho desnudo. Pienso que si no se vuelve es porque la puerta la hemos cerrado nosotros mismos, tal vez algún día volvamos, pero es un tal vez muy lejano.
En eso no hay diferencia, quien ha decidido partir, es porque ya no comparte lo cotidiano, más bien se siente asfixiado y necesita ver otros mundos, descubrir nuevas cosas. Hay una lógica es el crecimiento humano, con la diferencia de que hay quienes rompen abruptamente los lazos familiares. Entonces el desarraigo, es caro, a los sentimientos.
Otros por el contrario optan por continuar el camino impartido y seguir caminando junto a su familia.
Algunos compran pasaje de ida y vuelta, pero se les pasa el tiempo sin darse cuenta y al querer retornar ven que la fecha de vencimiento ya expiró. Tal vez ya no haya resto, ni ánimo, para pensar en volver.
La figura materna como refugio del alma, es un bello sentimiento de la vida intrauterina, que renace en la distancia autoimpuesta o no. Y es ahí donde encontrás lo más simple de la vida y te das cuenta de que lo que necesitamos para vivir no tiene nada de rebuscado y está al alcance de la mano. Solo tenemos que poder ver, no solamente mirar. Poder escuchar, no solamente oir.
Encontrarnos a nosotros mismos….....